Esta casa fue encargada al arquitecto Juan de Villanueva, en 1773, por D. Alonso Muñiz y Manjón, Marqués de Campo Villar, Mayordomo de Semana del rey Carlos III. Construida con el fin de arrendar a la más alta jerarquía cortesana durante las Jornadas Reales.
Villanueva proyecta una casa de planta rectangular, con lados paralelos al Monasterio y dos alturas, baja y noble. En 1928, se levanta una nueva planta y se añade una galería acristalada en su fachada este. A mediados del siglo XX, se agrega un cuerpo sobre el volumen principal.
El profesor D. Fernando Chueca, en la descripción que hace de esta casa, la compara con un palacio romano reducido. No cabe duda que, en esta casa, Juan de Villanueva ha plasmado los recuerdos de su estancia en Roma. Prueba de ello es la puerta principal, de medio punto con decoración de piedra almohadillada propia del Renacimiento italiano.